Todos los años es parecido, que si el viento, la lluvia o el frío. La cincomarzada, una fiesta asumida como emblemática por los zaragozanos ( carlistas mediante), en esencia la voluntad de ser libres en una sociedad libre, organizada por la Federación de Asociaciones de Barrios de Zaragoza para reivindicar aire y vida, será en esta ocasión un clamor contra el ICA. Miles de zaragozanos que han recurrido tal impuesto, miles y miles que se han negado a pagarlo. Y partidos que auspiciaron la revuelta, pusieron mesas y voluntades, poniéndose de espaldas. Así Podemos, morir de coherencia a cambio de magros dividendos. No les va mal el frío, la lluvia el viento. Que no haya gentes. Por eso habría que hacerle caso a un obispo francés que hace siglos dictó cambiar las estaciones. UN CINCO DE MARZO que podría celebrarse cualquier día del año, todos los días, si de celebrar la libertad y el progreso se trata.
¿Habrá que cambiar la CincoMarzada?
